La hipersudoración o hiperhidrosis es un trastorno que provoca una sudoración excesiva y desproporcionada en algunas zonas del cuerpo, como las manos, los pies, las axilas o la cara. Esta condición puede afectar negativamente a la autoestima y la calidad de vida de las personas que la padecen.
La Toxina Botulínica es un tratamiento no quirúrgico que actúa bloqueando la actividad de las glándulas sudoríparas responsables de la sudoración. Se aplica mediante unas inyecciones muy finas en la zona a tratar, con una mínima molestia y sin efectos secundarios graves. Es un método eficaz, seguro y avalado por numerosos estudios científicos.
Los resultados del tratamiento con Toxina Botulínica pueden variar según el caso, pero suelen durar entre 4 y 12 meses, siendo la media de 7 meses en el caso de la sudoración axilar. El tratamiento se realiza en la consulta del médico especialista, sin necesidad de ingreso hospitalario ni baja laboral.